Dominando Lisboa desde el Barrio Alto, el Convento do Carmo es el perfil más reconocible de la ciudad de Lisboa. Desde diferentes lugares de la Baixa es posible ver, allá en lo alto, la figura imponente de este inmenso esqueleto.
Aquí te dejamos nuestra galería de imágenes del Convento do Carmo en Lisboa. Hacer click en la imagen para abrirla.
Tiene una privilegiada situación, junto al precioso Elevador de Santa Justa, donde además de gozar de unas estupendas vistas del Castillo de San Jorge, nos tropezamos con este fantasmagórico y hermoso vestigio de la historia. Por si esto no fuera bastante, el Convento do Carmo es la puerta al divertido y bohemio barrio del Chiado.
Breve historia del Convento do Carmo
Construido entre 1381 y 1423 por orden del militar- y héroe nacional- Nuno Álvarez Pereira para acoger a una orden carmelita, fue fundado con el nombre de Monasterio de Nossa Senhora do Vencimiento do Monte do Carmo. Cuando el militar se retiró, adoptó el nombre de Fray Nuno de Santa María y se recluyo en este hermoso convento.
El Convento do Carmo incluía la mayor iglesia gótica de Lisboa y permaneció al amparo de la orden Carmelita hasta el gran terremoto de 1755. Ese fatídico evento convirtió la fabulosa iglesia en el impresionante esqueleto a cielo abierto que hoy domina la ciudad, además de ser un recuerdo palpable de aquel terrible terremoto que destruyó casi por completo la ciudad de Lisboa.
Solo durante el reinado de Maria I de Portugal (1777-1816) se hizo un intento de reconstrucción pero, afortunadamente para quienes tenemos hoy el placer de contemplarlo, cayó en saco roto limitándose tan solo a algunos elementos. Todo esto ha permitido que conserven prácticamente intactos muchos de los elementos originales.
Como es el Convento do Carmo
Estos elementos originales son los que dotan a esta gran iglesia en ruinas de todo su encanto. La fachada principal es un gran ejemplo de ello, así como el pórtico de la fachada de poniente. La iglesia consta de tres grandes naves, en algunos de cuyos elementos (arcos divisorios o ventanas) se puede apreciar el fruto del intento de reconstrucción de Maria I. Pero lo más hermoso e impactante del Convento do Carmo es la sensación que producen los grandes muros y arcos al sujetar directamente el cielo.
Por si todo esto no fuera aliciente de sobra para acercarse hasta el Convento do Carmo, éste ofrece al viajero una pequeña, pero muy grata, sorpresa, el Museo do Carmo. Un museo arqueológico con piezas de un enorme valor artístico e histórico que van desde la Prehistoria a la época Contemporánea, magistralmente integradas en las hermosas ruinas para formar un conjunto que resulta una delicia visitar.