Barcelona es una de esas ciudades europeas en las que da gusto estar. Por eso, cada año recibe a miles de turistas, quienes permanecen en ella por un tiempo considerable. Sin embargo, si nuestra estancia será limitada, hay que aprovecharla al máximo. Por eso, te sugerimos lo que puedes hacer en Barcelona en dos días.
Barcelona y sus icónicas catedrales
La edificación más conocida de toda Barcelona es, sin lugar a dudas, la Sagrada Familia. Esta catedral que se encuentra en construcción desde hace más de 100 años, es una de las principales atracciones de la ciudad.
Si en verdad quieres visitarla, te recomendamos que dediques al menos un día a este cometido, ya que las filas de turistas que se agrupan alrededor de la estructura suelen ser enormes, y en ocasiones, realmente asfixiantes.
Sin embargo, esta legendaria estructura no es la única gran catedral de la capital catalana, pues también encontraremos la Catedral de la Santa Cruz y Santa Eulalia, con sus más de 500 años de existencia, y la Iglesia de Santa María del Mar, uno de los principales templos religiosos de toda Cataluña.
Estaría genial si cerramos el día recorriendo el Paseo de Colón y la zona del Puerto, para disfrutar la brisa marina proveniente del Mediterráneo.
La vida comercial de Barcelona
Nuestro segundo día puede iniciar de comprar, y allí Barcelona destaca muy bien. De hecho, tiene una amplia gama de mercados, algunos de los cuales se encuentran entre los más grandes y famosos de Europa, siendo La Boquería el más conocido.
Nuestro paso por este mercado puede alternarse con una caminata por el Paseo de Gracia, el Portal del Ángel o La Rambla. En estos sitios encontraremos de todo, y al mismo tiempo disfrutaremos de la idiosincrasia de la ciudad.
Cerremos el día con buenas vistas
Luego de visitar las zonas comerciales, podemos relajarnos en durante la tarde del segundo día. En este sentido, Barcelona cuenta con distintos miradores desde donde puedes apreciar la belleza de esta ciudad.
Quizás el más importante de estos espacios sea los Búnkeres del Carmel, una antigua estructura bélica que data de los años de la Guerra Civil Española, pero que actualmente es utilizado como mirador, y vaya que destaca en el ámbito turístico. Además, este es un lugar tranquilo y no tan concurrido, lo que mantiene a sus visitantes protegidos de la presencia de muchedumbres.
Otro gran punto a favor de los Búnkeres del Carmel, es que el acceso es completamente gratuito, por lo que una escapada a este lugar no afectará tu presupuesto en lo más minino. Ten en cuenta que el mejor momento para visitar el mirador es al final del día, cuando el atardecer cae sobre la ciudad y Barcelona no podría verse más hermosa.
Si, por el contrario, deseas permanecer dentro del casco urbano de la ciudad, el Museo Nacional de Arte de Cataluña también puede ofrecer vistas maravillosas, además de interesantes exposiciones artísticas. De hecho, luego de ver todo lo que hay en la galería, no hay mejor plan que salir a la amplia terraza, desde donde se aprecia Barcelona en su máximo esplendor.
En ambos miradores no solo podrás tomar hermosas fotos, sino también disfrutar de una atmósfera idílica, lo que te permitirá cerrar a lo grande tu periplo por Barcelona en dos días.
