Un profesor de prehistoria británica tardía en la University College de Londres, llamado Mike Parker Pearson, dijo en alguna ocasión: “Nosotros no hacemos esa cantidad de descubrimientos fantásticos en la vida de la arqueología, pero este ciertamente es uno de ellos”, refiriéndose al hallazgo de Stonehenge. Uno de los monumentos más antiguos, famosos y al mismo tiempo lleno de misterio que ha sido desvelado.
Aquí te dejamos nuestra galería de imágenes de Stonehenge en Reino Unido. Hacer click en la imagen para abrirla.
¿Qué son los Megalitos?
Alrededor del mundo podemos encontrar algunos monumentos prehistóricos llamados megalitos, de épocas diferentes y en distintos continentes como Europa, Asia y América. Estos megalitos reciben su nombre de las palabras griegas “mega” que significa “grande” y de la palabra “lito” que significa “piedra”. Teniendo como principal particularidad que son formados por grandes estructuras de una o más piedras sin esculpir o cincelar.
Entre lo más importante de estos monumentos se encuentra el hecho de que para su construcción no se emplea mortero ni cemento, no siendo esto un impedimento para lograr levantar estructuras como grandes tumbas, cuevas y diversos centros de rituales, que se pueden apreciar en distintas formas, en pasillo o como por ejemplo en círculos que es el caso de las piedras de Stonehenge. Siendo este calificado como el sitio funerario más grande del neolítico tardío en Gran Bretaña, ya que en él se encuentran numerables fosas de restos incinerados.
Las investigaciones de las piedras de Stonehenge
En una reciente investigación la opinión del profesor Parker ha causado controversia en las islas británicas ya que dice que esta gran estructura fue levantada por primera vez en la nación de Gales para posteriormente ser llevada 500 años más tarde al país de Inglaterra en Reino Unido, esta tardanza, según el profesor Parker Pearson, no se debe por un traslado lento sino debido a que posiblemente se haya erguido cerca de la cantera algún tipo de monumento con estas mismas piedras, para luego ser llevadas a su lugar final. Por su parte también Rick Schulting, profesor de la universidad de Oxford opina que para poder ser enterrado en Stonehenge se debía ser una persona reconocida o de mucho dinero.
Además, se estima que las piedras azules del monumento que fueron erguidas en primer lugar, sean originarias del oeste de Gales, según lo revela la evidencia arqueológica. Todo esto apunta a que, según estudios de los fragmentos de huesos, en promedio unas 10 o 25 personas no vivieron en Wiltshire, nombre actual de la ubicación de las piedras de Stonehenge al sur de Inglaterra, sino que por el contrario podrían haber pasado al menos sus últimos 10 años al oeste Gales, conocido actualmente como Pembrokeshire.
A pesar de que los cadáveres fueron incinerados, se descubrió que las altas temperaturas pueden inclusive encapsular la señal química de origen, conteniendo así alguna información biológica que ha demostrado ser capaz de resistir hasta mil grados centígrados.
Estos estudios realizados 100 años posteriores al descubrimiento, han resuelto las interrogantes que se han generado desde su construcción entre los años 3180 2380 antes de Cristo. Sin embargo, las exhaustivas investigaciones no han aportado mayores datos de los 58 individuos cremados según datos de las excavaciones de 1919 a 1926. El foco de atención ha sido la enorme construcción y aspectos como el abastecimiento de las piedras, el traslado y orden astronómico que se le adjudica.
Con respecto al traslado el profesor Parker Pearson, comentó sobre una tendencia que se manejaba:
Ha habido todo tipo de teorías peculiares sobre la manera en que las piedras fueron movidas, desde el uso de fuerzas de sanación hasta por medio de música
Al mismo tiempo que se tenía la vieja creencia de que la migración era algo nuevo, sin embargo, ninguno de los dos planteamientos es cierto. Estas personas recorrieron grandes distancias en un terreno muy difícil, en una época que pensaríamos que resultaría imposible de realizar. Estos inmigrantes del pasado lo lograron mediante rampas, trineos y diversas estructuras de madera que facilitarían la movilización a través de una especie de rieles, trasladando así por 240 kilómetros no solo los cuerpos previamente incinerados sino también las grandes piedras del monumento, llamadas bluestones (piedras de arenisca azulada), con la ayuda de bueyes y grupos de más de 60 personas por piedra, debido a que cada una pesaba casi 2 toneladas. Esto fue determinado mediante el uso las técnicas arqueológicas más recientes aplicadas por una serie de científicos de la Universidad de Oxford, en los restos mayormente quemados de miles de años de antigüedad.
El investigador de origen belga Christophe Snoeck asegura que la clave del éxito de esta última investigación, fue no subestimar algunos fragmentos de huesos quemados, a pesar de que lucían totalmente destruidos; de ellos se logró obtener información valiosa sobre el origen de los individuos, logrando posicionarse así como la primera investigación en obtener estos datos tan determinantes con respecto a este misterio.
Ahora que hemos descubierto el secreto de las piedras de Stonehenge, podemos ir un poco más allá de la ciencia o lo mítico y admirar lo icónico de este monumento considerado como uno de los más populares del Reino Unido y del mundo. Debido a su singularidad se dice que recibe la visita de más de un millón de turistas por año.
Sin ignorar la belleza natural, es inevitable percibir una atmósfera de misterio debido al singular posicionamiento de las grandes rocas, las cuales por años y años han generado todo tipo de comentarios no solo en los turistas sino también en investigadores. Por lo cual no es de extrañar si próximamente se dan a conocer nuevos detalles, que esconden aún las piedras de Stonehenge.
Una fecha muy especial para visitar este monumento neolítico es en el solsticio de verano, donde todos los años se reúne una gran cantidad de personas a celebrar este acontecimiento en el lugar.
Sin importar la fecha o el motivo, sin duda alguna visitar las piedras de Stonehenge es una experiencia inigualable, que no se puede dejar pasar en una visita al Reino Unido.
Ya estando allí, usted mismo podrá sacar sus conclusiones sobre que tan místico y hermoso es este lugar.
¡Estamos realmente seguros que el viaje valdrá la pena!