Hay pocas ciudades en el mundo con la magia y el encanto de Estambul. Primero fue Bizancio, después Constantinopla y desde 1930 es Estambul. Esta ciudad milenaria, capital del Imperio Romano, el Imperio Bizantino y el Otomano, es sin duda una de las urbes más hermosas de mundo y un lugar al que nunca te cansarás de viajar.

Aquí te dejamos nuestra galería de imágenes de Estambul en Turquía:

Entre dos mares, el Mármara y el Negro; entre dos culturas, oriente y occidente; entre dos mundos, esta maravillosa ciudad es el puente entre Asia y Europa. Demasiado europea para ser una ciudad asiática y demasiado oriental para considerarla europea. Estambul es una joya única, diferente y especial que conjuga con maestría todo el encanto de oriente, su halo de misterio y sus perfumes de especias, con el alma de occidente, viva, cosmopolita y despierta. Es una ciudad donde los contrastes se encuentran, donde lo mismo y lo contrario tienen un espacio común. Demasiado tradicional para ser una ciudad moderna y tan moderna que no puede ser considerada tradicional, en Estambul puedes vivirlo todo de todas las formas posibles.

Que ver en Estambul

La Plaza Sultanahmet es, posiblemente, la mejor muestra de la magnificencia de esta ciudad. Aquí de dan cita dos de los lugares más hermosos e impresionantes de Estambul, Santa Sofía y la Mezquita Azul. Se desafían la una a la otra desde ambos lados de la plaza, ambas orgullosas y altivas; ambas pugnando por atraer la mirada anonadada del viajero en un lucha sin fin, sin más vencedor que quien disfruta del placer de contemplarlas y con un único botín, el recuerdo de dos visitas imprescindibles en la vida de todo viajero.

Después de haber visitado Santa Sofía y la Mezquita Azul tendrás la impresión de que Estambul ya te ha dado todo cuanto necesitas. Entonces será cuando esta ciudad vuelva a sorprenderte.

Muy cerca de Sultanahmet está el Palacio Topkapi. Allí tendrás la oportunidad de vivir y sentir una parte de la larga historia de esta ciudad. Todo el esplendor del Imperio Otomano está recogido en este palacio. Toda su belleza, su misterio y sus tradiciones atrapadas tras los muros de este gran palacio del siglo XV.

No lejos de allí, Estambul se vuelve a manifestar como la ciudad de los contrastes cuando te lleva de la mano a la Cisterna Basílica, un verdadero palacio sumergido construido hace mas de mil cuatrocientos años, donde se pierde el ritmo trepidante de la ciudad para transportar al visitante a un remanso de paz, tranquilidad y belleza.

Y aún queda mucho más por ver. El Canal del Bósforo, la Torre y el Puente Galata, el Gran Bazar o el Bazar de las Especias… mezquitas, universidades, una gastronomía que enamora, gentes abiertas, hospitalarias y simpáticas… colores, olores, atardeceres para recordar… y todo lo que busques o todo lo que sueñas. Esta ciudad tiene tantos lugares, tantas visitas imprescindibles, tanto momentos y tantas fotos para el recuerdo, que te será imposible decirle adios.

Por todo esto y por todo lo que sentirás cuando la conozcas, ¡Estambul es el viaje que necesitas hacer!

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